PRIMER PREMIO EN LA CATEGORÍA JUVENIL
NUNCA
ES TARDE PARA CUMPLIR UN SUEÑO
“Las cosas podían haber sucedido de cualquier otra manera y,
sin embargo sucedieron así…”
Emilia era una niña soñadora, creativa, y feliz. Deseaba
estudiar Bellas Artes y vivir en París. Cuando estaba finalizando Bachillerato,
su abuela enfermó y su madre le dijo: “Ayúdame hija, yo sola no puedo con tus
hermanos y con tu abuela” Y ella con una triste sonrisa, se quedó.
Pasaron los años y cuando sus hermanos se fueron a la
Universidad, pensó en marcharse, pero su madre enfermó y también le dijo: “Hija
¿Cuidarás de mi, como yo cuidé a tu abuela? ¿Verdad? Y ella con una triste
sonrisa se volvió a quedar.
Encontró el amor, un hombre bueno que la amaba, aunque nunca
la llegó a entender del todo. Los hijos llegaron rápido, los cuidó con amor,
dulces sonrisas y tristezas en el corazón. Los educó para que tuvieran sueños y
los cumpliesen, sabiendo que por nada del
mundo les pediría que se quedaran a cuidarla.
Cuidaba de todos y lloraba en silencio cuando le decían:
“Qué suerte has tenido en la vida, no has tenido que trabajar nunca y has
podido cuidar de todos los tuyos”
Al marcharse todos, ella se quedó sola, llena de años y
decidió “Cumpliré mi sueño”.
“Las cosas podían haber sucedido de cualquier otra manera y,
sin embargo sucedieron así, con una alegre sonrisa entró por la puerta de la
Universidad de Bellas Artes con la
ilusión de una niña soñadora, creativa y feliz.
ALEJANDRO VÁZQUEZ
PRIMER PREMIO EN LA CATEGORÍA DE ADULTO
VIDA E ILUSIÓN
Se casó y lo dejó todo:
su trabajo fijo, sus amigos, su vida activa, su libertad. De repente, se vio ahogada en una casa vacía; sus ilusiones de
mujer, su físico jovial, sus decisiones personales….todo lo fue perdiendo con el paso de
los dias, que se hacían interminables. Se sentía dichosa por no tener una jornada
laboral y así poder disfrutar de sus hijos, pero en el fondo de su corazón, pedía a gritos
una salida : un trabajo a su medida, una nómina ; a fin de cuentas, su FELICIDAD.
Parecía tenerlo todo, y no tenia nada . Ni siquiera podía
decidir el comprar algo nuevo , o cambiar de coche, o hasta cómo vestirse
. Vivía en un ciclo cerrado , y la
ansiedad
de sentirse sola y sin soluciones, le ahogaba y le inundaba de tristeza…
Han ído pasando los años, y esa muchacha llena de ilusiones,
todavía sigue siendo “ muchacha “ ; sin libertad, pero muchacha. Ha decidido
vivir su vida a su manera, pasar de imposiciones absurdas y de comentarios de la sucia
sociedad; educando a sus hijos en igualdad, lejos del machismo y de la intolerancia.
Vuela a su aire, y sus hijos, con ella. Soñando y no perdiendo la esperanza de que algún
día, encontrará el amor de su vida, que la valore en todos los ámbitos, que le haga
sentirse verdaderamente importante.
Ella sigue disfrutando de sus hobbies, de esas cosas que
llenan su vida y le mantienen viva e ilusionada ; pero cada día, cuando se
levante, se preguntará si será ese el día en que vuelva a poder disfrutar de su libertad, el día en que
encuentre un trabajo adecuado a su enfermedad y pueda decir adiós a su
sufrimiento; con la mirada puesta en un nuevo
Amor, hecha princesa, y en otro modo de vivir la vida QUE TANTO AMA…..